Aumenta tus defensas en otoño | Polen de abeja

¡¡¡ Hello !!!

I hope you're OK.

Aumentar las defensas en otoño es clave para prevenir numerosas enfermedades infecciosas, sobre todo las relacionadas con el aparato respiratorio.

Principalmente, debemos hacer frente a la bajada de temperaturas y la disminución de horas de sol con una dieta completa y equilibrada que nos asegure las cantidades correctas de nutrientes esenciales para conseguir una vida llena de energía y mantener nuestro bienestar general.

Para alcanzar esa dieta equilibrada, os quiero hablar del polen de abeja.

No hay muchos estudios científicos sobre las propiedades beneficiosas que se le asigna pero lo que es innegable es que se trata de un buen suplemento nutritivo.

Si os interesa el tema, no dudéis en seguir leyendo...

Imagen de la web PIXABAY

AUMENTA TUS DEFENSAS EN OTOÑO | POLEN DE ABEJA

Continuando con los factores que nos pueden hacer bajar las defensas de organismo, además de los mencionados en párrafos anteriores, existen otros muchos que contribuyen a debilitar nuestro sistema inmune. 

Algunos de ellos son:

- Estrés

- Ansiedad

- Insomnio

- Dormir pocas horas

Todos ellos derivan en unas defensas más bajas además de ir deteriorando poco a poco las funciones físicas, incluida por supuesto, la de combatir virus y bacterias.

También es verdad, que aunque nuestro sistema inmunológico esté sano y fuerte, nunca podremos evitar un contagio, pero teniendo unos buenos niveles de defensas, podremos combatirlo más fácilmente y reducir su duración.

Datos curiosos sobre los contagios

Durante los meses más fríos contraer un resfriado o una gripe es mucho más probable que en verano.

El calor de las calefacciones y las temperaturas frías que se dan durante estos meses secan el aire por debajo de los límites recomendados (rango entre el 40% y el 60% de humedad del aire).

Estas circunstancias pueden general problemas en las vías respiratorias y mucosas.

Si nuestra exposición a un ambiente seco es puntual, no deberíamos tener problemas pero una sobreexposición puede afectar a nuestra salud.

Cuando hay menos humedad, las partículas que transportan los virus son más ligeras y permanecen más tiempo en el aire.

Así mismo, la bajada de humedad puede secar e inflamar las mucosas de nuestro aparato respiratorio.

Esos son básicamente los principales motivos por el que nos podemos contagiar más.

Taparnos la boca con las manos al toser tampoco es la mejor opción para no extender el contagio a otras personas ya que al darles la mano, abrir una puerta o tocar el botón del ascensor por ejemplo, estaríamos dejando gran cantidad de virus.

Cuando tosemos hay que taparse la boca con el brazo y, si es imprescindible hacerlo con las manos, es necesario lavarlas inmediatamente con agua y jabón.

También es recomendable tener siempre a mano las soluciones desinfectantes como los geles hidroalcohólicos.

Dicho lo anterior, vamos a centrarnos en un buen suplemento nutritivo para intentar hacer frente a todos esos contagios que se nos avecinan. 

En esta ocasión me refiero al polen de abeja.

Se trata del polvo que las abejas recogen de las flores y transportan en sus patas de vuelta a la colmena.

Los apicultores, recolectan todo el polvo de esas patitas de las abejas obreras cada vez que entran a la colmena mediante una trampa especial situada a la entrada.

Estamos hablando de un producto que se comercializa deshidratado en forma de gránulos y, que concentran las células reproductivas masculinas de las plantas.

Es un alimento calórico. Su composición puede variar según las plantas de recolección y destaca por contener cantidades muy significativas de proteínas, minerales (fósforo, calcio, potasio, yodo, zinc, cobre, magnesio y selenio), vitaminas (A, D, E y K) y enzimas.

También despunta por contener casi todos los nutrientes que necesita el ser humano (22 aminoácidos esenciales).

El polén de abaje es bajo en grasa y sodio, su principal capacidad es energizante. Ideal para personas que realizan una alta actividad física.

De fácil absorción siempre y cuando lo tomemos en polvo o bien en extracto líquido. 

Otra opción, es morder directamente los gránulos de polen de abeja. El mejor momento del día para consumirlo es por las mañanas, en ayunas o con alimentos como el yogurt o el zumo de frutas recién exprimido.

Se utiliza principalmente para prevenir o reducir estados de anemia y de fatiga. 

Según he podido leer, si lo que queremos es mejorar las defensas, bastaría con tomarlo durante seis semanas durante el otoño y la primavera.

Las tomas pueden ir desde media cucharadita para los niños hasta tres cucharaditas completas para los adultos.


IMPORTANTE

Las personas que tienen alergias a las abejas, deben ingerirlo con mucho cuidado y siempre bajo supervisión médica.

Como siempre os digo en este tipo de entradas, cuando vamos a incorporar algún alimento nuevo a nuestra dieta, es imprescindible consultar con el especialista para que nos dé su opinión y la pauta de comienzo, que normalmente será a pequeñas dosis para ver si se produce alguna reacción alérgica.

También debemos de tener en cuenta que si padecemos alguna enfermedad o tomamos algún tipo de medicación podrían existir contraindicaciones importantes. 

Resumiendo, aunque no hay estudios científicos que demuestren que el polen de abeja puede mejorar la salud, lo que sí parece indudable, es que tiene un gran contenido nutritivo. 

Bueno y hasta aquí la entrada de hoy.

Solamente me queda deciros que si os gusta el tema de las abejas os invito a leer una entrada donde hablo largo y tendido de estás maravillas de la naturaleza La importancia de las abejas

Contadme,

¿Conocéis el polen de abeja? 

¿Está ya incluido en vuestra dieta diaria?

Deseo os haya parecido una entrada interesante.

Mil G R A C I A S por leer mi Blog, compartir y dejadme vuestros comentarios.

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