Mi opinión sobre la Esponja Konjac | LA MALVAFLOR

¡¡¡ Hello !!

I hope you're OK.

Hoy os quiero hablar sobre un producto nuevo que he incorporado a mi rutina de belleza. Se trata ni más ni menos que de una Esponja Konjac, utilizada en los rituales de limpieza coreanos gracias a su poder limpiador y exfoliante.

Os cuento, ¿Qué es?, ¿Cómo se utiliza? y ¿Cuáles pueden ser sus beneficios?.

¿Te interesa? Te invito a que sigas leyendo...

MI OPINIÓN SOBRE LA ESPONJA KONJAC | LA MALVAFLOR

Me vais a decir que voy tarde no, tardísimo en utilizar una esponja Konjac jajaja pero nunca me habían llamado mucho la atención.

Soy una persona que tiene especial cuidado con el tema de las esponjas húmedas, de hecho no uso esponja en el baño y pensaba, para que la voy a usar para la cara si no la uso para el cuerpo.

Pero bueno, como me encanta probar cosas para el cuidado de la piel, decidí investigar un poco más sobre el producto y valorar si merecía la pena incluirlo en mi rutina.

Por eso hoy os estoy hablando de la Esponja KONJAC de la marca LaMalvaflor.

Este tipo de esponjas es uno de los básicos de la cosmética coreana. 

El material del que están compuestas este tipo de herramientas de limpieza facial y/o corporal es de la raíz de Konjac (Konnyaku), una planta milenaria asiática que crece en lugares de gran altura y contienen fibras vegetales con un alto contenido en agua (97%)  y  el resto son minerales.

Gracias a su composición, se trata de una planta alcalina por lo que neutraliza de forma natural el pH de la piel ayudando a eliminar sus impurezas.

Así mismo, estimula la circulación sanguínea y proporciona alimento a nuestra piel. Suelen contener arcillas ricas en fósforo, magnesio, hierro, potasio, sodio y vitaminas de varios tipos (A, E, D y C).

Su superficie es rugosa y áspera pero cuando entra en contacto con el agua y se humedece, se torna suave y blanda.

Están recomendadas para todo tipo de pieles gracias a su origen natural. Pueden usarse por las mañanas para potenciar el efecto de los productos que utilicemos a continuación como por las noches, para eliminar eficazmente la suciedad depositada en nuestra piel durante todo el día.

Con la que me he estrenado es de la marca LaMalvaflor. 

Esta marca es una jabonería artesana que tiene su tienda física en Madrid, aunque también tienen página web para vender sus productos.

Ha sido un proyecto personal iniciado en un principio por dos hermanos. Ambos con un objetivo común, unir la tradición de los maestros jaboneros de siempre con la aportación e innovación técnica y rigurosa en todo el proceso.

Trabajan de acuerdo a las BPFC (Buenas Prácticas de Fabricación Cosmética) con total transparencia en la composición de los productos.

El resultado, un producto artesanal y limitado con ingredientes de alta calidad. No utilizan aceite de palma ni mantecas de procedencia animal. 

Sus fórmulas contienen aceite de oliva, aceite de coco, aceite de ricino, aceite de almendras, aceite de soja, manteca de cacao, manteca de karité, aceite de aguacate, aceite de argán, aceite de rosa mosqueta y aceite de jojoba entre otros.

Disponen de tres tipos de esponjas konjac:

- de Arcilla Blanca: que contiene un 10% de arcilla blanca, indicada para pieles secas ya que aporta minerales y otros nutrientes.

- de Arcilla Verde: que contiene un 10% de arcilla verde y está indicada para pieles mixtas o grasas, con brotes de granitos puntuales. 

Su misión es la de absorber la suciedad y el exceso de grasa proporcionando una limpieza de poros. 

- de Carbón de Bambú: que contiene un 10% de carbón de bambú. Esta esponja está indicada para pieles grasas con tendencia acnéica. 

Posee una mayor capacidad de absorción del exceso de grasa y tiene además, propiedades astringentes, antibacterianas y antiinflamatorias.

Forma de utilización

Nunca se debe usar en seco. Es importante humedecer la esponja con agua tibia. 

A continuación, escurrimos el exceso de agua y masajeamos la piel con movimientos circulares para activar, exfoliar y refrescar.

No es obligatorio añadir ningún tipo de jabón. No obstante, se puede usar en combinación con un jabón natural y de este modo potenciaremos más su efecto.

No hay que acelerar su secado. Se debe hacer de forma natural en un lugar ventilado y sin que la dé la luz directa del sol. La cuerda que trae nos facilita el poder colgarla cómodamente.

Al ser una esponja natural, tampoco es recomendable estrujarla o usarla de forma agresiva sobre la piel. Hay que hacerlo todo con mucho mimo y delicadeza.

Una vez seca es normal que la esponja se endurezca, pero recuperará su estado normal después de humedecerla nuevamente.

Si la conservamos en el frigorífico cuando está seca, podríamos alargar su vida útil que está en torno a los dos o tres meses.

Si queremos desinfectarla, de vez en cuando debemos sumergirla unos minutos en agua hirviendo para limpiar y eliminar las bacterias que se depositen en ella.

Su precio es de 6,50 euros.

Opinión personal 

La utilizo en mi rutina de limpieza de mañana y lo que consigo con su uso es una piel saneada, purificada, con una gran suavidad y mucha luminosidad.

Al ser un tubérculo natural, es un producto 100% biodegradable por lo que no es contaminante.

No tiene conservantes, colorantes ni pigmentos artificiales por lo que resulta una alternativa ecológica para la limpieza facial.

Llevo poco tiempo utilizándola pero las primera impresiones son muy positivas.

La utilizo indistintamente con jabón (Gel de Rosa Centifolia de la marca REN) o sola. Depende del día y como esté de inspirada jajaja. 

Contadme, 

¿Normalmente utilizáis esponjas Konjac en vuestra rutina de Belleza? 

¿Cuales son vuestras favoritas?

Deseo haya sido una entrada de vuestro interés y hayáis pasado un rato entretenido.


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